Policías municipales de esta localidad detuvieron a una mujer, momentos después de que en complicidad con otros sujetos extorsionó con 400 mil pesos en dinero y joyas a una familia para no hacerles daño y cuando trataba de extorsionar con otros 300 mil pesos a otra familia.
Policías municipales informaron que la captura de esta mujer, se logró la tarde de este jueves en el fraccionamiento Lomas de Tecamachalco, en atención al llamado de una familia que aseguraba acababa de ser extorsionada, además, dijeron, también brindaron apoyo a otra familia, en la colonia San José Poza Honda, en este municipio, a quien de igual forma esta mujer y sus cómplices pretendían extorsionar para no hacerles daño.
La Dirección General de Seguridad Ciudadana y Tránsito Municipal informó que en respuesta al reporte de un posible robo en una casa habitación en Avenida de las Fuentes de Lomas de Tecamachalco, efectivos municipales acudieron al lugar, donde se entrevistaron con un ciudadano, quien indicó que era víctima de extorsión.
Explicó que la familia recibió varias llamadas para amenazar a sus integrantes y extorsionarlos, por lo que entregaron dinero en efectivo, joyas y relojes por un valor de 400 mil pesos aproximadamente, además de que los delincuentes volvieron a llamar para exigir más objetos de valor.
Ante ello, los policías municipales montaron un operativo para intervenir en caso de que los delincuentes regresaran y capturarlos en flagrancia y así sucedió, la víctima identificó a una mujer dentro de un vehículo Versa color vino con placas del Estado de México, como la persona a quien le entregaron las cosas.
Guadalupe Erandi ‘N’ de 31 años fue detenida y trasladada a la Fiscalía Regional de Naucalpan donde el agente del Ministerio Público abrió una carpeta de investigación por “extorsión con complementación típica con punibilidad autónoma”.
En la colonia San José Poza Honda, elementos de la corporación apoyaron a otra ciudadana que había recibido varias llamadas telefónicas para exigirle 300 mil pesos a cambio de entregarle a su hijo, a quien no lograba localizar, por lo que se implementó un dispositivo de búsqueda y localización en las zonas aledañas.
Una hora después, el menor de 17 años regresó al hogar y explicó que recibió una llamada para decirle que tenían secuestrada a su mamá y si no juntaba 300 mil pesos la iban a matar, además de que en ningún momento debía cortar la comunicación, razón por la cual era imposible localizarlo.
