En un lamentable suceso que evidencia la crítica situación de seguridad en Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México, un comerciante perdió la vida tras negarse a pagar el denominado “derecho de piso”. El incidente, que acentúa la problemática de la extorsión en la región, ocurrió en la taquería del ahora occiso, donde fue acribillado por un individuo armado.
Según testimonios de testigos, el comerciante, quien se dedicaba a la venta de tacos desde hace años, fue confrontado por un sujeto que le exigió el pago de una cuota para permitirle continuar con su negocio. Tras rechazar la demanda, el hombre fue brutalmente atacado con un arma de fuego. Pese a la rápida intervención de los servicios de emergencia, la víctima falleció en el lugar debido a las graves heridas.
El agresor, junto con un cómplice, huyó del lugar en una motoneta, dejando atrás un escenario de consternación y miedo entre los residentes del área. Hasta el momento, las autoridades no han logrado dar con los responsables del crimen.
Este caso no es aislado en Nezahualcóyotl. Recientemente, se reportó el asesinato de un transportista que denunció ser víctima de extorsión por parte del crimen organizado, lo que refleja una tendencia preocupante en la región.
En el municipio de Nezahualcóyotl, Edomex, se registró el asesinato de un taquero, muy cerca de la estación Pantitlán del Metro; primeras versiones señalan que se trató de un caso de extorsión. #LasNoticiasDeFOROtv con @ERIKCAMACHOTV | #SiempreEnVivo | #SiempreContigo | Sigue la… pic.twitter.com/jq9SAg5ojF
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¿Qué es el Derecho de Piso? De acuerdo con un documento de la Policía Federal, el derecho de piso es un tipo de extorsión en el que criminales exigen pagos a negocios a cambio de “protección” o para evitar daños y violencia. Esta práctica, tipificada en el artículo 390 del Código Penal Federal, conlleva penas de prisión de 2 a 8 años. Desafortunadamente, se ha vuelto una actividad común en algunos estados de México, fomentando un ambiente de miedo y silencio entre las víctimas.
Este trágico incidente subraya la urgente necesidad de abordar el problema de la extorsión y la violencia en el Estado de México. La comunidad y las autoridades deben trabajar juntas para crear un entorno más seguro y poner fin a este ciclo de intimidación y miedo. La sociedad mexiquense clama por justicia y medidas efectivas para proteger a sus comerciantes y ciudadanos.
