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En el municipio de Tultepec, donde el 70 por ciento de su población se dedica a la pirotecnia, se ha parado la producción de juguetería y castillería hasta en un 50 por ciento, por lo que se están viendo afectadas alrededor de mil 200 familias que dependen de alrededor de 177 productores registrados, sin contar a los comercializadores. Lo anterior derivado de la declarada fase tres de la pandemia del Coronavirus COVID-19.

Y es que una vez que México entró a esta etapa de la pandemia, las diferentes Arquidiócesis, Diócesis y autoridades de los tres órdenes de gobierno ordenaron cancelar todos los eventos multitudinarios, entre éstos los religiosos, desde clases de catecismo hasta las fiestas patronales en parroquias e iglesias del país.

Por consecuente, los coheteros de Tultepec, se vieron obligados a detener la producción pues ya no tendrían lugar para almacenar, al tiempo de cancelar los contratos ya firmados para los meses de abril y mayo.

Juventino Luna Rodríguez, titular de la Dirección de Desarrollo de la Pirotecnia del municipio de Tultepec, indicó que se ha dejado de exportar productos a sitios de Veracruz, Tlaxcala, Puebla, Guanajuato, Hidalgo, Monterrey, Nuevo León y Tijuana, Baja California, “todo está parado por la crisis de la pandemia”.

Sostuvo que “La Capital de la Pirotecnia”, surte de una gran variedad de artefactos a toda la república mexicana. Lo más demandado para las fiestas patronales son los castillos, que van desde los 10 hasta los 30 metros de altura y cuyo costo oscila desde los cinco mil pesos hasta los 100 mil pesos, dependiendo de la altura y su contenido.

Mientras que un torito, algo muy típico de las fiestas de los pueblos, puede costar entre 800 pesos y mil pesos.

Lo que también tiene gran demanda para los eventos religiosos son los crisantemos, antes conocidos como bombas, que pueden costar al menos 200 pesos, a los que se suman los cohetones de luz y trueno, las llamativas cascadas, las candelas, los trabucos y crisantemos de efecto.

También lo más demandado son los cohetones, cuya gruesa, que consta de 144 unidades, tiene un costo en el mercado de Tultepec de unos mil 500 pesos.

En lo que respecta al mercado de San Pablito, también en el citado municipio mexiquense, por el momento no funcionan sus 260 locales, en los que se venden por persona hasta 10 kilos de variedades de cometas, cuete blanco, los famosos R-15, baterías de luces, varas, chifladores, cometones y ollitas.

Y si bien los artesanos de Tultepec han detenido su producción al haberse suspendido de forma temporal las fiestas patronales y demás festejos donde se queman cohetes, como son las misas dominicales, por ejemplo, esperan repuntar en el mes de Septiembre, durante las Fiestas Patrias y en el mes de Diciembre, previo y durante el festejo de la Virgen de Guadalupe, finalizo Juventino Luna Rodríguez, titular de la Dirección de Desarrollo de la Pirotecnia del municipio de Tultepec.

Via: Hoy Estado.



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