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Ante el riesgo de que exista un accidente en los 12 kilómetros por donde atraviesa el ducto de Pemex en Toluca, debido a los problemas de huachicol, es urgente que la autoridad municipal notifique del posible riesgo que existe para cerca de 200 mil habitantes que viven, estudian, trabajan o transitan en la zona, pues no se respetó el derecho de vía.

Precisó que a lo largo de 12 kilómetros que comienzan en San Cayetano Morelos y se extienden hasta San Cristóbal Huichochitlán, ha predominado el nuevo crimen organizado dedicado a la extracción ilegal de hidrocarburo que ordeñan el ducto Tula-Toluca, misma que en este momento está resguardada por el Ejército Mexicano.

Esta región conocida por el robo de combustible comienza en la localidad de San Cayetano, un pueblo de al menos 10 mil habitantes, rodeado por campos de sembradíos, dijo.

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Recordó que aun cuando la mayor responsabilidad es del estado y de la federación en cuanto a la seguridad del ducto, el Ayuntamiento de Toluca debe notificar sobre el riesgo que existe, pues se trata de territorio municipal.

Comentó que en la zona se expide una ordeña sistemática, silenciosa , casi imperceptible y corrupta, pues nadie los vigila.

Mencionó que aún cuando hay postes amarillos donde se indica que atraviesan los ductos de Pemex, muy cerca existen lotes bardeados donde acuden pipas a abastecerse, sin embargo la autoridad ha hecho caso omiso, pues por décadas se ha permitido.

A ello se agrega la contaminación de mantos acuíferos, el problema es que la delincuencia organizada no sólo está afuera, sino a veces al interior de las instituciones.

Sostuvo que en los últimos 26 años se ha autorizado en la zona un crecimiento desordenado, orquestado a través del Plan de Desarrollo Urbano de Toluca.

Por ello hay comercio, viviendas, escuelas, espacios deportivos a lo largo de 12 kilómetros, lo que hace urgente dar aviso sobre la franja que está en alto riesgo, y que desarrollo urbano, medio ambiente y protección civil empiecen a revisar las construcciones. Aun cuando, insistió, es mayor responsabilidad del gobierno del Estado de México.

Indicó que cada válvula impacta en medio kilómetro a su alrededor en caso de un accidente, a lo que se debe agregar que existen instalaciones de gas y electricidad en la zona, por lo que cualquier accidente que ya en sí es preocupante, puede extender el daño y riesgo.

Via: El Sol de Toluca.