La muerte en el municipio es sistemática y lo mismo es encontrarse en el fin de los días en una unidad de esas chatarras-o ruteros- que en la propia calle tras una riña entre “malosos”, o por venganza y de plano, la ejecución en respuesta a la invasión de territorios.

Insistimos y comunicábamos que, el nivel del crimen en Naucalpan había rebasado a todo tipo de autoridades de seguridad en la materia, y es cierto.

De igual manera, y con la balacera el fin de semana en la zona de cantinas del “Pueblo de Los Remedios”, documenta la grave crisis de inseguridad y violencia callejera que registramos.

Pese a ello y que para el gobierno en su instancia municipal al parecer, tiene otras prioridades que atender, al cuidar las vallas zona cero del Contagio de Covid-19, y supuestamente vigilar la sana distancia en Naucalpan centro, en el otro extremo, los es el sacarse la foto en Ciudad Satélite.

Tenemos que reconocer y admitirlo, que de nueva cuenta el municipio regresó con todo a ocupar los primeros lugares en el Edomex con respecto a violencia callejera.

Lo anterior y resulta ésta y a estas fechas, al ubicar los 130 homicidios dolosos del año, con una tasa promedio mensual de 14.4 asesinatos, una cifra delicadamente irreverente y con tendencias a la alza.

Los índices del crimen son fríos y la cifra negra del delito es todavía más delicada, y observamos que, por ejemplo de acuerdo a nuestras investigaciones, en 2017 tuvimos en el mismo periodo que se reporta de enero al 6 de septiembre- (113) , en 2018 (92) y 2019 (153).

El 2019 ha sido el año históricamente más violeto en Naucalpan con el gobierno de morena y aliados en una década- y el 2020 va en la misma ruta, ya es evaluable su ejercicio y va en el segundo año consecutivamente con éste alto grado del crimen-

La percepción social es de total inseguridad, no obstante a diferencia de otros años en relación a los asesinatos callejeros, lo daban también los asaltos de manera violenta o mano armada de vehículos y en el que numerosos automovilistas eran despojados de sus unidades e incluso baleados.

De esos casos, lo sustentan una serie de denuncias en su momento de familiares de homicidios ocurridos entre 2016 y 2017 sobre la Avenida Lomas Verdes, Fuentes de Satélite y la Glorieta de Pintores

Referir y sin dejar de lado los “levantones a chicas, el sonado caso de Karen y la señora Adriana, quienes fueron “descuartizadas y encontrados en una vivienda en maletas en la colonia, Presa Tejocote”

Aunado y qué decir de los secuestros exprés a Junior’s en las afueras de la Zona Roja de Ciudad Satélite o Zona de Antros, en San Bartolo y otros puntos quizá “ciegos” de los centros de comando- C-4 y C-5, jamás atacados por las propias y distintas fuerzas del orden.

Sumar y de alrededor de seis años atrás hasta hoy, las guerras territoriales por los grupos del crimen organizado, en la que los saldos rojos son frecuentes y no son menores las muertes a usuarios del transporte público de pasajeros que, cotidianamente se juegan la vida en esas “unidades chatarras”.

Finalmente y para evaluar las cosas, este Año y 9 meses de gobierno, aparte de ser los más violentos del último lustro, el peor en resultados en la materia y de las gerencias de priístas y panistas.

Por Mario Ruiz Hernández


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