Extorsionadores vuelven a sembrar el terror al matar a líder transportista, crimen con el que suman cinco personas, entre ellos dos choferes, un cacharpo y una checadora, para obligarlos a pagar “derecho de piso”, en Ciudad Cuauhtémoc.
En un periodo de 15 meses, extorsionadores, conocidos como “Renteros’, han asesinado a cinco personas agremiados a la ruta Autotranaporte Marte S.A de C.V, el último el presidente de esa empresa, conocido como José García, quien ya había sido amenazado de muertes esto como medida de presión al exigirles el pago de una cuota semanal que va de 15 a 20 mil pesos.
Se sabe que autoridades tenían conocimiento por las denuncias que hicieron representantes de la línea transportista más afectada de todo este municipio, por recibir amenazas de distintos grupos de renteros, pero no han intervenido o investigado para dar con los responsables de esos crímenes que han quedado impunes.
Desde el mes de enero del 2017 comenzaron las amenazas directas al líder y socios de la ruta en mención, sin embargo, tuvieron que comenzar a pagar la extorsión después de que en 15 de febrero de ese mismo año Ericka Briseño, checadora de las unidades, fue acribillada de un balazo en la cabeza en la caseta ubicada en avenida Circuito Herrería, esquina con calle Tizoc, donde realizaba el reporte de los viajes que realizaban los chóferes a cambio de unas monedas.
Es importante mencionar que el pánico entre los transportistas se desató el 4 de marzo del 2017, cuando el conductor conocido como “La Paula” y el cacharpo con apodo “La Ganga”, aparecieron muertos, tirados a un costado de la carrera Texcoco-Lechería, a la altura de los Héroes Tercera Sección, horas después de haber sido secuestrados del microbús que conducía sobre avenida de los Escritores, en Ciudad Cuauhtémoc, donde antes de huir prendieron fuego a la unidad con matrícula de circulación 060-03-1K.
Ese suceso provocó que la mañana del 13 de marzo los conductores paralizarán el servicio y se manifestarán en avenida Nacional, apoyados por chóferes de la ruta Tecalco y Buendía, para exigir a las autoridades el cese a tantas extorsiones, cuyo líder y socios presentaron sus denuncias de esa ataque y ante el caso omiso de autoridades locales y estatales, pidieron que fueran policías federales quienes realizarán la investigación para dar con los culpables de sus trabajadores asesinados.
Al no tener respuestas de la institución de impartición de justicia, obligaron al dirigente de la ruta a acatar instrucciones de extorsionadores y pagar el dinero que le exigían para dejarlos seguir operando.
Era sabido que conductores trabajaban con miedo pero seguían brindando el servicio, cuando la mañana del 27 de abril, un comando armado rafagueó una base de microbuses de la misma línea, ubicada en Avenida de las Torres, entre calle Álamo y Calipso, donde un chofer murió y otros dos resultaron heridos.
Durante ese ataque en la sección Nopalera, los criminales dejaron junto al cuerpo del hombre que fue identificado con el nombre de Carlos, de alrededor de 47 años, a quienes sus amigos le decían “El Papa”, un mensaje firmado con las siglas “M.M.L”, para presionar a otras dos líneas de transportes que operan en esa comunidad a pagar también una renta.
Sin embargo, con el transcurrir de los meses y para seguir trabajando tranquilos, se sabe que la ruta continuaba pagando su cuota semanal que va de 15 a 20 mil pesos semanales a los “Renteros”.
Extrañamente, la tarde del jueves, José García Rivas, presidente de Autotransportes Marte, fue acribillado a balazos junto a su auto tipo Astra, color negro, con placas de circulación NRR-95-86, del Estado de México.
José salía de una tintorería ubicada en la calle Camecatl, esquina con avenida Tonatl, cuando unos desconocidos le dispararon y emprendieron huida, por lo que se presume fueron integrantes de la banda de extorsionadores quienes privaron de la vida al hombre que en diversas ocasiones fue amenazado de muerte.
Ahora son cinco personas asesinadas que formaban parte de esa empresa transportista, una de la más afectadas de Ecatepec, víctima de varios grupos de extorsionadores que continuarán operando libremente sin que las autoridades tomen cartas en el asunto para combatir la inseguridad en la comunidad donde también varios comerciantes han tenido que cerrar sus negocios por no tener para pagar el “derecho de piso”.
Via: A fondo.
